Autobús de Gijón con Alsa

Autobuses a Gijón

Gijón es una gran ciudad costera emplazada en el norte de España. Dispone de un rico patrimonio marítimo, un precioso barrio de pescadores y la categoría histórica de villa, está habitada por más de 270 000 personas y es zona de paso del Camino de Santiago en su ruta costera. Además, cuenta con una estación de autobuses céntrica, bien conectada con el resto de la ciudad por las líneas de autobuses 10, 14 y 25.

¿Cuál es la principal estación de autobús en Gijón?

La principal estación de autobuses a Gijón se localiza en la calle Magnus Blikstad, en pleno centro urbano y muy cerca de la estación de trenes. Se trata de una instalación atomadora y funcional, dotada con 6 andenes, sala de espera, cafetería, servicio de información y compra de boletos.

¿Qué compañías de autobuses ofrecen rutas a Gijón?

La compañía Alsa asume la mayor parte de los autobuses a Gijón, lo que se traduce en un servicio basado en una flota moderna, fiable, cómoda y plena de servicios, entre ellos aseos, luz individual, aire acondicionado, asientos confortables, espaciosos, y en algunos casos entretenimiento personalizado. En función del destino, es posible encontrar líneas directas que agilizan los desplazamientos.

¿Por qué viajar en autobús a Gijón?

Recorrer los 471 kilómetros que conectan Gijón con Madrid en menos de 6 horas es posible gracias a los autobuses a Gijón. Asimismo, existen más de 25 frecuencias diarias, motivo por el cual los viajeros pueden estomar sus horarios idóneos. Además, también desde Zaragoza el trayecto en autobús es muy agradable y atractivo, pues se realiza en menos de 8 horas y hay 8 horarios diferentes. En cualquier caso, viajar en bus hasta esta población asturiana resulta económico y permite llegar descansado al destino.

Antes de viajar a Gijón en autobús es bueno saber...

Gijón es una villa llena de encanto, esplendor, belleza y entretenimientos. Uno de ellos, evidente y conocido por todos, es que cuenta con una espectacular playa en el centro urbano. Además, pasear por el antiguo barrio de pescadores de Cimavilla permite sumergirse en un espacio emocionante que parece detenido en el tiempo. Admirar la estatua de Don Pelayo, en la plaza del Marqués, o la fachada del Palacio de Revillagigedo antes de tomar un culín de sidra en la plaza del Lavaderu forman parte de su encanto. Para moverse por la ciudad, el servicio de autobuses urbanos, los búhos nocturnos y el bus turístico son muy recomendables.